Mi resumen de 2018 (cine y TV) – parte I

Llegamos a la recta final del año, y como siempre apetece echar la vista atrás y hacer un repaso de todas las nuevas películas y series que nos han acompañado a lo largo de 2018. La magia del cine va más allá de poner nota a todo ese nuevo imaginario que pasa a formar parte de nuestro bagaje cinéfilo: al final, lo que cuentan son esas escenas que nos han emocionado, los gags que nos han hecho reír e incluso las obras que nos hacen fruncir el ceño.

Sin más preámbulo, pasamos a repasar otro año de cine y series en este primer post de todo lo que he visto producido a lo largo de 2018:

Para recordar en mitad de la noche: Hereditary (Ari Aster)

Una de las películas del año, capaz de colarse tanto en las pesadillas como en la vigilia. Una atmósfera familiar incómoda y perturbadora, una trama armada a conciencia y un buen puñado de escenas directas a grabarse a fuego en la mente. Gracias Toni Collette; te has convertido en la imagen que me atormenta cuando me asalta la sed en mitad de la noche y debo avanzar a oscuras por la casa. 

Crítica Hereditary

Para trascendencias que arden como el fuego: Burning (Lee Chang-dong)

La imagen de una muchacha semidesnuda, contoneándose delicadamente ante una puesta de sol, se ha convertido en una de mis secuencias favoritas de 2018. Porque a menudo no reconocemos la trascendencia de los pequeños momentos hasta que ya es demasiado tarde. Una obra poética y desgarradora que se queda en el recuerdo para regresar una y otra vez.

Crítica Burning

Para (re)descubrir la bondad: Lazzaro feliz (Alice Rohrwacher)

Mejor si conseguís llegar a este film sin que las sinopsis os destripen las sorpresas que alberga su trama. Una de las piezas con más corazón de este año, donde la personificación de la bondad se antepone a la maldad del que elige ejercer la villanía sobre el más débil.

PD: Si no os disteis cuenta, sale Dora de La vida es bella (Nicoletta Braschi).

Crítica Lazzaro feliz

Para paladear con el corazón en un puño: Roma (Alfonso Cuarón)

Cleo se ha convertido en uno de mis personajes del año, capaz de encarnar el recuerdo de las madres y abuelas que trabajaron, se sacrificaron y amaron calladamente y sin descanso para proporcionar aquello que consideramos “hogar”. Tanto la secuencia del hospital como la final, junto al mar, lograron hacerme saltar las lágrimas más honestas que recuerdo desde hace mucho.

Para psicoanalizarnos durante el Apocalipsis: Aniquilación (Alex Garland)

Uno de los films más comentados del año ha sido una producción de Netflix, Aniquilación. Amparada por la siempre bienvenida presencia de la actriz como la copa de un pino que es Natalie Portman, con este film asistimos a un contexto apocalíptico -tan devastador como hermoso- en el que la humanidad parece estar sentenciada por una región en expansión que no promete nada bueno para la humanidad. Ciencia ficción y terror se dan la mano en una propuesta que nada en un existencialismo que va más allá del fin del mundo, 

Para consultar antes de asistir a la academia de espías: Gorrión rojo (Francis Lawrence)

La solvencia de una actriz con tantas tablas como es Jennifer Lawrence queda demostrada en esta producción de espionaje sucio, donde los propósitos de los personajes quedan enmascarados por sus acciones y misiones. Dura, elegante y repleta de un erotismo salvaje, Gorrión rojo se erige como una propuesta estimulante y absorbente donde los giros quedan amparados por un guión bien armado. 

Crítica Gorrión Rojo

Para disfrutar de “hostias como panes”: The night comes for us (Timo Tjahjanto)

Gracias a esta cinta indonesa disfruté de mi momento “despiporre” en la última edición del Festival de Sitges. Unas coreografías que harán caérsele la baba a los fans del cine de acción; no penséis demasiado en la trama y limitaos a disfrutar de la salva de mamporros. Fans de The Raid, ya estáis tardando. 

Para ver sin emitir ruido: Un lugar tranquilo (John Krasinski)

Tras un prólogo que asienta las bases de la trama con efectividad y que no se priva de asestar un pequeño golpe a la moral del espectador, Un lugar tranquilo se erige como una de las cintas de terror más estimulantes del año. Espléndida Emily Blunt y un más que destacable John Krasinski a los mandos.

Para escuchar (mucho) su banda sonora: Ha nacido una estrella (Bradley Cooper)

El debut de Lady Gaga en el cine ha sido satisfactorio, así como su indudable química con un Branley Cooper que demuestra su faceta más que solvente como director. Un film que tiene su mayor punto fuerte en sus inicios, con el forjar de la historia de amor, para luego tornarse algo más tópica en su desarrollo. Aun así, resulta muy disfrutable. Y sí, he escuchado en bucle Shallow.

Para revisionarla de tanto en tanto: Ready Player One (Steven Spielberg)

Sin ser una obra maestra, Spielberg logra una obra trepidante y sumamente entretenida que tiene como pieza magistral la escena basada en El resplandor. Si le sumamos un universo virtual irresistible, guiños a mansalva y unos protagonistas que resultan humanos y carismáticos, Ready Player One se convierte en la cinta ideal para esas tardes tontas en las que no eres capaz de decidir película.

TO BE CONTINUED… 

Noemí Escribano

Comunicadora Audiovisual, lectora voraz y procrastinadora nata.

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