Toni Erdmann – la alegría del absurdo
Cuando generalizamos está claro que no podemos hablar por boca de todo el mundo; sin embargo, no creo haber sido la única que, en algún momento de su vida, ha experimentado una sensación similar al vacío. Esos momentos llegados de forma indeterminada en que, por más que te esfuerzas, no logras ver el sentido a lo que te rodea, a esas rutinas que has adquirido por voluntad propia o que te han impuesto, a esas acciones casi mecánicas del día al día.
En definitiva: tu vida no te llena y caes en un pozo existencialista del que Jean Paul Sartre estaría orgulloso; la mayor parte de las veces son etapas que, afortunadamente, se terminan superando. Inés, la protagonista femenina de Toni Erdmann, parece estar atravesando una que ya dura demasiado tiempo, tanto que parece haber tomado el timón de su propia vida. Por suerte tiene a un padre que es todo un figura y que está al rescate; eso sí, sus métodos no serán nada convencionales.
La vacuidad en nuestras vidas
Es extraño; en el momento de visionar Toni Erdmann lo cierto es que no llegó a apasionarme, lo cual me dejó algo atónita teniendo en cuenta las críticas que la precedían. No fue hasta unas horas más tarde, reposándola y recordando algunos de sus momentos, algunos verdaderamente brillantes, cuando la película adquirió un cariz distinto. El resumen de la conclusión a la que llegué es que tal vez Toni Erdmann dé una impresión equivocada, algo así como los mismos personajes del film. En un principio puede que opines que no tiene trascendencia, pero luego, en cierta manera, se queda contigo. Y eso no es algo que la mayoría del cine sea capaz de conseguir.
Lo dicho; no me resultó fácil llegar a esta conclusión: quizás es porque también opino que la película se extiende innecesariamente en algunas de sus partes. A pesar de las declaraciones de la directora sobre haber hecho uso del metraje necesario para contar su historia, creo que su impacto hubiera sido mayor sin estar tan diluida en ese mar circunstancial, que te deja un poco a la deriva durante tres horas.
También es cierto que, en un primer lugar, cuesta mucho sentir algo de empatía por Inés (todo lo contrario, más bien), aunque eso es algo que está resuelto con mucha eficacia a medida que transcurren las diferentes situaciones y ella se va humanizando más y más, hasta desembocar en la cómica escena (para mí, de las mejores de la cinta) del desnudo. La falta de ropa es, en este caso, una liberación tan física como mental y funciona a las mil maravillas; de hecho, para mi gusto el filme debería haber concluido ahí; sin embargo aún quedaría una especie de epilogo en el que mi mente terminó yéndose de paseo irremediablemente.
Una ayuda inesperada
Escribo sobre Inés, pero más que de ella de quien verdaderamente hay que dedicar líneas es al padre y a su álter ego, Toni Erdmann. Este progenitor bromista quiere salvar a su hija de ese vacío miserable al que llama vida y no se le ocurre otra forma de hacerlo que mediante su peluca y sus dientes falsos, ejerciendo de caricatura tanto de Inés como de su entorno, dejando así en esperpento un modelo de vida tan supuestamente digno y que es desmontado con suma facilidad y un par de artilugios de broma.
Lo mejor es ver como el foco pasa del padre a la hija pero que el verdadero protagonismo lo siga ostentando él, aunque en la sombra y a la inesperada. Y lo bonito es vivir con Inés su cambio de actitud, pasando del enfado a la resignación, de la resignación a la llamada de auxilio y del grito de socorro a la risa, carcajeándose de todos y de ella misma en primer lugar, atónita por esa osadía venida de ningún lugar.
Para mí, Toni Erdmann es un film que encuentra su valor en el poso que deja a posteriori y en los momentos en los que brilla especialmente, como la ya mencionada escena del desnudo o la de la discoteca, grabada a fuego con sólo una mirada muda en busca de ayuda.
Al final, la cuestión es darse cuenta que, aunque la mayoría hayamos sido alguna vez como Inés, todos deberíamos ser mucho más como Toni Erdmann.
Ficha Toni Erdmann Filmaffinity
Tráiler Toni Erdmann
https://www.dailymotion.com/video/x4rc85y